Hiperconvergencia y sistemas hiperconvergentes integrados
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Para hablar de hiperconvergencia debemos remontarnos años atrás, casi décadas, cuando la virtualización se extendió por todos los centros de datos. Esta tecnología de abstracción supuso una revolución, pero también un incremento notorio en las necesidades de rendimiento del soporte físico donde descansaba. Debido a la facilidad con la que se creaban máquinas virtuales, los servidores multiplicaron su carga y exigencia y sí, el resultado fue que mejoramos la eficiencia de los sistemas, pero a cambio de incrementar la complejidad de las infraestructuras de red y almacenamiento.
Los sistemas convergentes
Los sistemas convergentes nacieron con el objetivo de simplificar la arquitectura informática que daba soporte a la virtualización. Su arquitectura integraba en un mismo módulo el hipervisor, servidor físico, almacenamiento y electrónica de red. Eran equipos desarrollados desde cero para dar soporte a tareas virtuales, no como la vieja infraestructura tradicional, que «le cayó encima» la virtualización y se adaptó a ella a duras penas. Supusieron un nuevo salto en términos de eficiencia y rentabilidad.
Sistema convergente Flexpod de Cisco/Netapp
¿Qué es la hiperconvergencia?
La hiperconvergencia es una nueva vuelta de tuerca en la tarea de minimizar la complejidad de la infraestructura informática de virtualización. Usando como base o infraestructura física a los sistemas convergentes, se coloca una capa superior de software que los gestiona (hipervisor), aislando por tanto las operaciones de hardware, y ofreciendo un solo bloque único.
En lugar de crear máquinas virtuales en cada servidor convergente, las creamos en el servidor «virtual» hiperconvergente y él se encarga de gestionar dónde realmente se crearán y cómo se ejecutarán. El resultado es un coste de infraestructura menor, un sistema fácilmente escalable y una carga inferior para los administradores de TI.
Evolución desde la virtualización hasta la hiperconvergencia
Sistemas hiperconvergentes integrados
Las previsiones de la consultora Gartner ya hablaban en 2016 de que los sistemas hiperconvergentes integrados o HCIS serían populares en 5 años y cierto es que no han errado, pues ya podemos considerar a 2018 como el año clave de esta arquitectura según los últimos datos del sector:
- Ventas creciendo a un ritmo del 55 % en comparación con 2017.
- Un mercado con valor de 2.000 millones de dólares en 2018.
- Una estimación para 2019 de alcanzar los 5.000 millones de dólares.
Todavía no podemos hablar de una estandarización, pero vamos camino de ello. La reducción de la complejidad es un caballo de batalla para toda empresa o datacenter de tamaño medio o pequeño, y estos sistemas, como solución todo en uno, es justo lo que necesitan. El personal de TI puede ahorrar tiempo en la gestión de la infraestructura física para dedicarse a administrar los servicios que ofrece.
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